Semana 1 de embarazo. (Sdg1w0d)
La primera semana de embarazo en realidad no estás embarazada todavía. Durante esta semana algunas mamis tendrán la menstruación/regla, un sangrado vaginal provocado por la descamación de la capa funcional del endometrio que se ha preparado para alojar al óvulo fecundado. Al no haber óvulo fecundado. Cuando no existe fecundación, se produce la menstruación/regla.
Es la etapa preovulatoria, variable de una mujer a otra, que se inicia con el primer día de la regla.
El ciclo femenino tiene una duración aproximada de 28 días, pero el 90% de las mujeres tiene ciclos de entre 23 y 36 días. Hay mujeres que incluso tiene ciclos más largos y variables de un mes a otro, por lo tanto es muy difícil calcular el momento de la ovulación y más aún las semanas de embarazo en mujeres con los ciclos tan irregulares.
Una mujer que tiene el período cada 47 días no tendrá las mismas semanas de embarazo que una que lo tiene cada 23 días, por ejemplo. Puede llegar a haber semanas de diferencia entre una y otra, por lo tanto la fecha de parto de la primera será después de la semana 40.
Aún así, se toma el primer día de la última regla como punto de partida del embarazo, pero en realidad el tiempo de gestación sólo podrá ser calculado de forma más exacta por medio de las mediciones de las ecografías.
Aunque esta es oficialmente la primera semana de embarazo, la concepción no llegará hasta dos semanas después, cuando se empiece a producir el desarrollo embrionario, coincidiendo con el periodo de ovulación.
Durante estos días, que coinciden con el periodo, la membrana del útero o endometrio se genera y se prepara para el embarazo. Si este no se produce, la membrana se desprende y tiene lugar la menstruación, que difiere en volumen y duración entre una y otra mujer.
Durante esta semana 1, también empieza la disposición de las hormonas para la ovulación, que se producirá a finales se la segunda semana.
Para ello, la glándula pituitaria (ubicada en la base del cerebro) produce una hormona folículoestimulante, que estimula el desarrollo de los folículos, los cuales contienen los óvulos en distintas fases de maduración. Estos folículos generan estrógeno, una hormona que provoca que la glándula pituitaria también genere la hormona luteinizante, que dispara la ovulación .
Esta primera semana de embarazo, sin embargo, aunque los niveles de estrógeno y progesterona se mantengan bajos, favorecen que los músculos del cuello del útero se relajen, lo que permite que se abra el canal uterino y que la mucosa se vuelva más fluida, algo que favorece a su vez que el espermatoziode pueda “nadar” en ellas más fácilmente, dando lugar a la concepción y al posterior desarrollo embrionario.
¿Qué se puede ver en la ecografía/ultrasonido?
La mucosa uterina continúa engrosándose, aumenta su suministro de sangre y está lista para la implantación de un óvulo fertilizado. En la primera imagen, el contorno del útero en forma de pera es claramente visible contra el fondo de una gran sombra oscura: la vejiga.
En el interior, en la cavidad uterina, el endometrio es visible en forma de un punto brillante. Durante este tiempo, creció otros 7-10 mm.
Debajo del útero, se ve un ovario en forma de nuez. A juzgar por su forma y tamaño, la ovulación y maduración del cuerpo lúteo se produjo en otro ovario.
En la segunda imagen, vemos el ovario, los contornos del cuerpo lúteo están emergiendo claramente, su red vascular está marcada con azul y rojo. Un suministro de sangre tan abundante asegura su crecimiento adecuado y, si ocurre un embarazo, también garantiza su desarrollo.